La Casa
XIXè
Desde más de cinco generaciones la familia Deville posee sus viñas y vende sus uvas a grandes casas que producen champán. En el siglo XIX, la cultura y el trabajo de la viña ya están implantados en los genes de los abuelos, hijos y nietos, pero el deseo de producir champán todavía no se manifestó.
1966
Es en 1996, cuando Jean-Paul tiene 23 años y que trabaja el viñedo como su padre y su abuelo antes que él, que le llegue la gana de crear, a partir de sus uvas, un champan que tenga su nombre. Crea entonces su propio ensamblaje y pone a envejecer en sus bodegas su vino.
1968
Deseando dominar la totalidad del proceso de «champagnisation», Jean-Paul decide construir un edificio con lagares en Verzy. Eso le permite realizar el prensado de sus propias uvas y así controlar la vinificación de sus vinos enteramente.
1968
La primera botella comercializada bajo la marca Jean-Paul Deville sale en 1968. Es el comienzo de una bella historia.
1986
En 1986, el champán Deville es uno de los primeros «pequeños productores» en empezar a elaborar un champán rosado, según el método tradicional del ensamblaje.
1996
¡Para mantener el impulso, Jean-Paul Deville decide crear diez años después un champán Blanc de Blancs … una apuesta atrevida puesto que la casa Deville se ubica en un pueblo clasificado Grand Cru y famoso por sus pinots noirs! Con sus chardonnays que tienden a tener sabores a pinot noir y su envejecimiento de cuatro años, descubrimos un Blanc de Blancs único… ¡Apuesta ganada ya que todavía hoy conoce un gran éxito!
2015
Tras su regreso en la empresa en 2003, Marie-Alice, hija de Jean-Paul, decide volver a estudiar y elige enología con fin de profundizar su pericia en el dominio del vino para traer sus conocimientos técnicos y que beneficien a la empresa. Obtiene su Diploma Nacional de Enóloga en Reims en 2015 y comparte desde entonces la elaboración de los champanes de la casa Deville con su padre.
2017
En 2017, como respuesta a los resultados de una encuesta con todos nuestros clientes para conocer su sensibilidad en cuanto al color del vidrio de la botella, decidimos cambiar la botellas del Opalis Blanc de Blancs que eran transparentes para venderlo en botellas de vidrio negro... Hicimos esa elección por razones de conservación del vino y de protección contra la luz natural que puede dañar al vino y cambiarle el sabor. Las primeras botellas negras se podrán comprar en 2021.
2018
50 años despues del lanzamiento de la primera cosecha Deville, Marie-Alice revela Quinte Essences, una cosecha efímera creada especialmente para la ocasión. Producida a tan solo 5000 botellas, esa cosecha resalta por primera vez cepas "olvidadas". Así, el arbanne y el petit meslier se añaden a las cepas más tradicionales que son el pinot noir, el chardonnay y el meunier.
Nuestra profesión de viticultores la vivimos a lo largo de las cuatro estaciones, a través de etapas manuales precisas.
El invierno le ofrece a la viña un descanso vegetativo bien merecido después de los esfuerzos del verano. Sin embargo, si caminan por el viñedo durante el invierno nos verán modelar pacientemente nuestras cepas podándoles y atándoles para encontrar el justo equilibrio entre vigor y fertilidad y asegurar la calidad de la próxima cosecha.
Durante la primavera la viña renace antes de que nuestras preciosas uvas maduren durante el verano. Es el momento de las “obras en verde”, le prestamos toda la atención que necesita:
El “ebourgeonnage”
Para evitar que la viña se canse útilmente, quitamos los botones que no van a dar frutos.
El “relevage”
Segunda etapa de estructuración, tenemos que levantar las ramas para organizar la arquitectura de la viña.
El “palissage”
Con el propósito de limitar los riesgos de podredumbre, de aumentar la ventilación y de optimizar la exposición al sol de nuestras cepas, desplegamos las ramas.
El “rognage”
Etapa que se repite varias veces durante el verano, el rognage permite limitar el vigor de la viña para favorecer la calidad de la cosecha antes de la cantidad.
Para terminar, llega el otoño y con él, el tiempo de la cosecha, exclusivamente hecha a mano a fin de respetar la integridad de nuestras uvas y entonces la calidad de su jugo.
Desde entonces empieza nuestra misión de vinificación. Para hacer un vino blanco tan excepcional como el champan a partir de un viñedo plantado por los dos tiercos de uvas negras (Pinot Noir y Pinot Meunier), tenemos un secreto: el método champenois.
El vidrio de las botellas de champagne es mas espeso y resistente que el de las botellas de vino para resistir la fuerte presión de gas encerada (6 bares). El fondo de la botella es también muy cavado por la misma razón. Eso les permite también a los adeptos del arte del “servicio a la champenoise” agarrar la botella por el fondo.
El champan es el vino por lo cual existe la cantidad más grande de botellas de tamaños diferentes. La mayoría del tiempo el champan se vende en botellas (75cl), media-botellas (37,5cl) o magnum (1,5L) pero en realidad existen 15 capacidades desde 20cl hasta 30L. Las más famosas son:
El jeroboam
3L o sea cuatro botellas. Es la botella más pedida entre todas las grandes botellas.
El mathusalem
6L o sea ocho botellas.
El salmanazar
9L o sea doce botellas.
El balthazar
12L o sea dieciséis botellas.
El nabuchodonosor
15L o sea veinte botellas o entre 140 copas.
Hay que saber que entre más grande la botella envejece mejor el champán. Así, una media-botella tiene que ser bebida rápidamente cuando un Jeroboam puede quedarse en la bodega durante varios años.